Contra la renta mínima vital

La renta mínima vital elimina el incentivo para trabajar

12/05/2020

Vivimos tiempos difíciles con esta pandemia. La economía se ha parado durante dos meses y no podrá reanudarse en no sabemos cuántos más. Esta situación ha provocado un aumento del paro como jamás se había visto desde que existen estadísticas. No somos los únicos pero sí lo somos en poner en marcha ideas “peculiares”. Otra vez elegimos el camino del populismo y otra vez analizamos mal el problema. ¿Hay mucho paro? En vez de crear empleo, damos una paga que llamaremos renta mínima universal. ¿Es buena idea crear esa paga? Bueno, pues sí y no.

Sí, pero limitada

Sí es buena idea crear un sistema asistencial durante la cuarentena. Nos han obligado a quedarnos en casa, está prohibido salir. En una situación como esa todo aquel que no tenga ingresos o ahorros se verá en la situación de saltarse la cuarentena y se verá obligado a hacerlo porque los humanos tenemos la manía de comer. Necesitamos comer para vivir y sin ingresos no se puede. Si no puedes salir a la calle a buscar esos ingresos, no puedes comer, con lo que o dan una renta mínima o se saltarán el confinamiento. Un país desarrollado como España no puede permitir que sus ciudadanos mueran de hambre. Igual que se ha decretado una cuarentena para salvar vidas, debemos crear un ingreso mínimo vital para salvar vidas. Este ingreso mínimo vital debe estar en funcionamiento todo lo que dure la cuarentena y posteriormente eliminarlo.

Por qué eliminarla

Es fundamental eliminar toda renta mínima universal por dos razones fundamentales. La primera es que para pagar esa renta hay que previamente quitar ese dinero del que trabaja. No es justo ni sostenible cargar al que trabaja con el sostenimiento no sólo de él y su familia sino de otros. Estaríamos en la situación de que el trabajador sostendría a jubilados, funcionarios y benefactores de la renta mínima universal. Por cada persona que creara riqueza habría que sostener a otro que no lo hiciera. Insostenible. La segunda razón es todavía más importante que la primera.

Incentivos

La economía es el estudio de la acción humana. En contra de lo que algunos creen, la economía no son matemáticas, la economía es el estudio del comportamiento humano. Los humanos funcionamos de una determinada forma y cuando entiendes como, es cuando puedes saber si una medida económica es buena o mala. Los humanos nos esforzamos para mejorar nuestra vida. Aunque nos guste decir lo solidarios que somos en realidad no lo somos tanto. Es evidente que la especie humana tiene un sentimiento de empatía y vive en sociedad. Ese sentimiento de empatía y de vivir en sociedad nos ha hecho dominar el planeta. Somos capaces de ayudarnos y ansiamos pertenecer a un grupo, pues eso nos aumenta las posibilidades de sobrevivir. Todo esto es verdad pero también lo es que para que haya un esfuerzo mayor, eso no basta. Cuando vivimos en una comunidad pequeña sentimos más empatía por los integrantes de nuestra comunidad que cuando vivimos en una comunidad de cientos de miles o millones de personas. Conocer a todos los integrantes de tu comunidad te hace sentir más empatía. Además, esto tiene unos límites, una vez que se alcanza la supervivencia la gente tiende a la holganza. ¿Para qué trabajar más si no lo necesitamos para vivir? Es aquí donde entra el individualismo. Este es el gran logro de la humanidad, somos seres sociales pero también tenemos sentido de la propiedad privada. Y esto es lo que nos ha hecho salir del paleolítico. La gente se esfuerza más allá de la supervivencia para mejorar su vida. Una renta mínima universal te quita ese incentivo. Aquellos que trabajan ven como su vida no mejora lo suficiente o no mejora nada porque la renta de su trabajo se transfiere a otros que además no conoce. Cuando eso pasa, el que trabaja y crear riqueza empieza a plantearse si merece la pena seguir esforzándose. Este incentivo a no trabajar es fundamental porque elimina a muchos trabajadores y por lo tanto cotizantes, lo que eleva la carga sobre los que quedan desincentivando así a otros a seguir trabajando. Además también desincentiva a los que perciben la renta. Estos suelen ser los trabajadores menos cualificados y por lo tanto los que al trabajar tienen un menor sueldo. Esto hace que se planteen si merece la pena el esfuerzo para ganar un poco de dinero más. Cuando además llevan mucho percibiendo esa renta, se han alejado del mercado laboral tanto que pierden la posibilidad de encontrar trabajo y ya se han acostumbrado a vivir con la renta mínima.

Clientelismo

Esta renta no se crea para evitar hambre, tampoco para evitar la pobreza. Esta renta crea hambre y pobreza por lo tanto no se crea para eso, esta renta se crea para perpetuarse en el poder. Es una compra de votos. Crear una sociedad en al que millones de personas dependan de esa renta para subsistir y amenazar con su eliminación si no te votan. Así es como se creó el PER, así es como funcionan países como Argentina. Argentina pasó de ser uno de los países más ricos del mundo a ser un país en vías de desarrollo debido a políticas como esta. Argentina se ha convertido en un país pobre pero que vota a todo aquel que asegure que va a mantener el clientelismo. ¿Es eso lo que queremos para España?