Se confirman las peores sospechas, no tenemos un presidente, tenemos un meme. Pedro Sánchez tiene un gobierno muy difícil debido a su debilidad, la debilidad que le da el tener 84 diputados mientras necesita 176 para aprobar cualquier ley. Es por esto por lo que Pedro Sánchez decidió hacer propaganda en vez de gobernar. Todas sus propuestas consisten en hablar de Franco, de la Guerra Civil y de cualquier cosa a la que se pueda oponer la España conservadora. Está haciendo un gobierno más radical que el de Zapatero. Está colocando a gente de su cuerda en todos los puestos. Empezó aumentando el gobierno, siguió aumentando los asesores, continuó cambiando los muebles de la residencia presidencial y sobre todo lo que se ha dedicado a hacer es propaganda. Utiliza los medios del Estado en su beneficio propio. Televisión Española le hace entrevistas masaje en las que queda claro que es guapo e inteligente. Las cuentas oficiales del Estado de La Moncloa y los ministerios en las redes sociales han dejado de informar sobre la actividad del gobierno para hacer burda propaganda. Así vemos en la cuenta de La Moncloa en Twitter como se nos enseña al presidente haciendo deporte con el escrito: un poco de deporte antes del trabajo. La propaganda es tal que cae en el ridículo más espantoso. La mofa es generalizada al ver al presidente con gafas de sol dentro de un avión leyendo papeles o enseñar unas fotos de sus manos. En Televisión Española nos enseñan continuamente al presidente y nos icen que un nuevo tiempo se abre para el país. Como si antes de la llegada de este escombro intelectual no hubiera democracia o bienestar en España.

Para eso se hizo la moción de censura, para hacer propaganda electoral usando los mecanismos del Estado. A Pedro Sánchez le importa poco el país, le da lo mismo el bienestar de la nación, lo único que le importa a Pedro Sánchez, es Pedro Sánchez. Ha aprendido de Zapatero que se puede no hacer nada bien pero ganar elecciones. La técnica es sencilla, hacer que las gente no te vote a ti sino que te vote a ti para votar en contra de alguien. Zapatero sacó la Guerra Civil, la dictadura franquista y cualquier cosa que enfrentara a los españoles. El fin de esta política era radicalizar a la sociedad y que esta no votara con la razón sino con el corazón. Esta técnica la usó Pablo Iglesias de Podemos brillantemente y con ella logró que le votaran los descontentos por la crisis y la corrupción. Pedro Sánchez aprendió de todo esto. Zapatero es su maestro y de él saca sus ideas. Quiere usar los mecanismos que tiene el Estado para hacerse propaganda y para enfrentar a los españoles. Su única meta es ser reelegido. El poder es su único aliciente. Siempre fue así aunque es verdad que jamás pensamos que fuera capaz de hacerlo. Algunos creen que el partido no le dejará. Esto se ha demostrado falso, el PSOE es capaz de cualquier cosa con tal de estar en el poder. Sus votantes tragarán con todo si con ello el partido conserva el poder. Nos esperan dos años de propaganda pagada por usted y yo.