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El experimento social

La red social es una película que habla de la creación de Facebook y el experimento social es un experimento en esta red sobre como tratan a unos usuarios y a otros


Experimento social

Los que me conocen saben que llevo una racha buena de bloqueos en mi cuenta personal de Facebook. En concreto en los 5 primeros meses de 2018 me han bloqueado la cuenta 3 veces a razón de un mes por cada vez. Actualmente sigue bloqueada hasta mediados del mes de junio. Las razón en todas ellas, según la Santa Inquisición de Facebook es incumplir las normas. Debido a que ya las he incumplido algunas veces más, unas 2 o 3 veces al año, actualmente cada vez que me eliminan un comentario me bloquean un mes. Alguno podrá pensar que los incumplimientos son graves, pero lo cierto es que no es así. Suelo leer la prensa en Facebook aunque también uso mucho Twitter. Entro y veo las noticias que cuelgan los medios o periodistas a los que sigo. Cuando algo me interesa pincho y lo leo. Con frecuencia comento algo en los comentarios de las noticias y con frecuencia me contestan. Algunos de esos comentarios que me ponen son insultos a los que respondo de la misma forma. Pues bien, últimamente cada vez que una mujer me insulta y la contesto me bloquean. No es que yo las insulte sino que contesto a sus insultos de la misma forma. El último bloqueo fue de la siguiente manera. Puse un comentario sobre la piscina del chalé que se ha comprado el coletas (El secretario general de Podemos). Mi comentario fue el siguiente: “A mí lo que me molaría es mearme en la piscina”. A este comentario una hija de su madre me contestó diciendo que soy un animal y que por lo tanto no me dejarían entrar. Mi contestación fue: Esta tía es tonta, siempre está defendiendo a Pablo Iglesias. Pues bien, la loca del coño me denunció a Facebook y a mí me quitaron el comentario y me bloquearon la cuenta. Yo denuncié su comentario y según me contestaron, no infringía las normas.


Después de esto y del anterior que fue más o menos parecido, decidí hacer un experimento. Decidí abrirme dos cuentas en Facebook, una a nombre de un hombre y otra a nombre de una mujer. Entro en las noticias y me meto con Pablo Iglesias, con los separatistas catalanes y con el aborto. Esto lo hago para recibir insultos como contestación a mis comentarios. Lo hago con las dos cuentas, la de hombre y la de mujer. Cuando recibo dos insultos parecidos en las dos cuentas procedo a denunciar el comentario a Facebook. Debe ser un insulto igual o parecido. No recibí ningún insulto repetido pero sí algunos muy parecidos. Insultos no muy graves, sino de los más normales. Pues bien, el resultado es que todos los insultos denunciados con la cuenta en la que soy un hombre blanco y heterosexual han sido rechazados porque no incumplían las normas de Facebook. Con la otra cuenta las cosas cambian. De los 5 insultos recibidos, Facebook ha eliminado 2 porque infringían las normas comunitarias. El truco es sencillo, si eres mujer debes denunciar el comentario diciendo que se mete con un sexo.


Debería haberme hecho otra cuenta haciéndome pasar por musulmán. No se me ocurrió en el momento de hacerme las dos cuentas y por eso no lo he probado aunque tengo sospechas más que fundadas a que pasa exactamente lo mismo. Digo esto porque el año pasado ante un comentario que puse, un musulmán me contestó que las enseñanzas de dios decían no sé qué. Mi comentario no recuerdo cual fue pero no era sobre religión. La contestación que le di fue que me daba igual su religión y que dejara de dar el coñazo con su religión. Mi contestación fue quitada y fui bloqueado un mes. En otras ocasiones ante ataques a los católicos (yo soy ateo así que esos ataques no iban en contra de mis comentarios) denuncié esos comentarios para ver si también eran quitados y la respuesta de Facebook siempre fue que no infringían las normas.


La corrección política nos rodea. Ya no se puede decir prácticamente nada sin ofender a alguien. Pero lo peor es el trato desigual que recibimos. Si eres un hombre blanco y heterosexual, no tienes derecho a nada y todo lo que digas es ofensivo, aunque lo que digas sean contestaciones a ataques. Si eres mujer o de otra religión que no sea cristiana o de otra raza que no sea blanca puedes denunciar lo que quieras que siempre tienes las de ganar. Pues bien, ya he encontrado la solución para poder leer las noticias, a partir de ahora las leeré desde una cuenta en la que soy una mujer. Ya puedo escribir lo que quiera sin que nadie pueda denunciarme y podré denunciar el comentario que me apetezca. Les recomiendo que hagan lo mismo si son hombres.


Aquellos que no me crean pueden probarlo, solo es necesario abrirse dos emails para abrirse dos cuentas. Ábranse una como mujer y otra como hombre. No me crean, háganlo y prueben a ver qué pasa.