Extradición
No puede ser que un juez alemán decida que a un ciudadano español no se le puede acusar de un delito cometido en España. Hay que colaborar entre los países democráticos y con garantías judiciales para evitar que los delincuentes campen a sus anchas
España pertenece a la Unión Europea y como miembro que es se sitúa entre los países Schengen. Los países Schengen son unos países entre los cuales sus ciudadanos pueden circular libremente, es decir no hay fronteras. En este acuerdo no solo hay países de la Unión Europea sino que además se incorporaron otros como Suiza. La idea de eliminar fronteras era sencilla, que hubiera libertad de movimientos para favorecer la libertad y también la prosperidad económica que eso conlleva. La libertad es buena porque los hombres hemos nacido para ser libres, preferimos con frecuencia la libertad a la vida. Otro de los beneficios, al menos sobre el papel, era impedir que los delincuentes aprovecharan las fronteras para cometer delitos y escapar de la justicia. Recuerdo ese anuncio que nos ponían en la televisión cuando era pequeño y España estaba a punto de entrar en la Unión Europea, en aquella época se llamaba Comunidad Económica Europea. Era fácil ver los anuncios, en aquella época solo había dos canales de televisión, los dos de Televisión Española (TVE), lo que se llamaba la primera cadena, hoy La 1 y la segunda cadena llamada popularmente UHF (porque emitía en frecuencia UHF), hoy conocida como La 2. La segunda cadena no la veía nadie porque era todavía peor que ahora, todos veíamos la primera cadena. Lo único que podías hacer por la noche era leer un libro o ver la primera cadena. En las dos cadenas de televisión nos echaban a todas horas unos anuncios de los beneficios de entrar en la Comunidad Económica Europea (CEE), ahora Unión Europea (UE). Había hasta un anuncio que nos decía lo maravilloso que era pagar el nuevo impuesto que nos iban a poner al entrar, el IVA. Los anuncios eran unos dibujos animados muy básicos. Eran tiempos de ingenuidad. Había un anuncio en el que salían unos delincuentes, unos ladrones, huyendo de la policía. El anuncio decía lo que sucedía en aquel momento y lo que sucedería al entrar en la CEE. En el ahora salían los ladrones huyendo y al cruzar la frontera los policías que iban persiguiéndolos tenías que parar y los ladrones huían. Luego salía lo que pasaría al entrar en la CEE. Los ladrones cruzaban la frontera pero los policías no se detenían, la cruzaban y los detenían. Maravilloso. En los tiempos en que la organización terrorista ETA mataba en España y cruzaba a Francia para quedar libres, en los tiempos en que ETA tenía locales en Francia en los que recaudaban dinero, reclutaban asesinos y hacían mítines para nosotros la CEE era una maravilla. Por fin los criminales iban a pagar. Esto no fue exactamente así y aunque ETA dejó de campar a sus anchas, los etarras estaban libres por Francia y nadie hacía nada. No fue hasta la llegada de Aznar a España (1996) que no se presionó a Francia para que hiciera algo. Francia poco a poco empezó a colaborar y su colaboración sobre todo con la llegada a la presidencia de la república de Nicolás Sarkozy, acabó con ETA. ETA llegó a disolverse, no de forma oficial pues todavía no lo ha hecho, pero acabamos con el terrorismo. Esto fue gracias a la colaboración de las justicias española y francesa, gracias a la eliminación de fronteras.
Euroorden
Cuando los países de la UE hicieron la Euroonden fue para eliminar esas fronteras. Cuando se eliminaron, en realidad en temas policiales y de justicia no se hizo. Así, no era verdad ese anuncio en el que la policía cruzaba la frontera para detener a los ladrones que perseguía. En realidad la policía seguía sin poder cruzar. Al ser países de la UE se acordó colaborar en materia de justicia y facilitar la extradición. El planteamiento era claro, si todos los países de la UE eran democráticos y tenían garantías de hacer juicios justos y respetar los derechos humanos, los países no deberían poner pegas a la hora de extraditar. La Euroorden permitiría eliminar todos esos trámites tan farragosos. Entonces se hizo y los países miembros incorporaron la Euroorden. Lo que pasó a continuación es que eliminar esos trámites no eran constitucionales en muchos países. Así al final la Euroorden dejó de ser algo beneficioso y se convirtió en exactamente lo mismo que pedir una orden de extradición normal. Esto es porque los países de la UE no terminan de dar el paso de perder soberanía a cambio de colaborar. Eliminar de tu justicia el revisar las órdenes de extradición elimina soberanía ya que no juzgas tú a todos los ciudadanos europeos que capturas dentro de tus fronteras, pero en este caso es bueno. Es bueno porque no todos los códigos penales son iguales y lo que en un país es delito en otro es un delito leve. Además las penas e interpretaciones pueden variar.
Esto es lo que ha pasado con Puigdemont. El ex presidente de la Generalidad de Cataluña cometió dos delitos al declarar la independencia. Cometió malversación de fondos públicos (hasta 12 años de cárcel) por desviar dinero público para declarar la independencia, y un delito de rebelión (entre 15 y 20 años de cárcel). Este delito se comete al dar un golpe de estado que además se hace con violencia. La violencia ha quedado acreditada ya que se alentó a la gente a que saliera a la calle a tomar por la fuerza las instituciones y así controlar la comunidad y declarar la independencia.
El juez alemán
Puigdemont fue detenido en Alemania al realizar el juez español que lleva la investigación. La policía alemana le detuvo y le encarceló. Entonces es cuando llegó el famoso juez alemán. La fiscalía alemana lo vio claro, enviar a Puigdemont a España tal cual, con todos los cargos que tiene imputados en España. Sin embargo el juez alemán no vio claro el delito de rebelión. Como he dicho antes, el problema de las extradiciones es hay que revisar si la justicia del país que tiene al reo, reconoce los delitos por los que se le reclama. La justicia alemana sí reconoce el delito de rebelión, aunque ellos lo llaman alta traición. ¿Entonces cuál es el problema? El problema es que a los jueces les gusta mandar. El juez alemán, que es un juez regional (el juez español es un juez de la máxima instancia judicial en España) dice que la malversación sí está demostrada pero no la rebelión. Dice que está demostrado que hubo violencia, que además Puigdemont es el instigador pero que esta violencia no es suficiente para que el golpe de estado pudiera llevarse a cabo, es decir no hubo una violencia suficiente que hiciera rendir a España. Resumiendo, que si el golpe de estado no triunfa, no hay delito porque si fracasa la violencia nunca será suficiente para hacer que triunfe. Esta es la estupidez que ha dicho el juez alemán. Es una interpretación, otro juez podría haber interpretado otra cosa. Lo malo no es lo que interpreta, lo malo es que se interpreta. Él debería limitarse a ver si el delito existe en Alemania y luego extraditar y no ponerse a interpretar si la violencia fuen suficiente o no, para eso ya está un juez español investigando y luego habrá un juicio. Es el juez español el que lleva meses investigando y no el juez alemán. Después de esa investigación, la que hace el juez español, el caso pasará a juicio en donde otro juez distinto le juzgará. ¿Quién es el juez alemán para determinar sin juicio y sin investigación si ha cometido ese delito? Nadie, no es nadie. El problema es que según la justicia alemana debe decidirlo. Esto es porque los países de la UE siguen sin confiar unos en otros, se tratan como si los países de la UE no tuvieran sistemas judiciales con garantías. Es el remanente de la guerra fría en la que en un país comunista te acusaban de un delito por decir que no eras comunista. En aquella época cruzabas el muro de Berlín y eras libre porque no podías ser extraditado ya que la justicia alemana (la de la República Federal Alemana) no reconocía ese delito y por lo tanto no te extraditaba.
Solución
La solución que veo es que todos los países democráticos que demuestren tener un sistema judicial garantista, deberían colaborar. No solo los países de la UE sino todos, los de todo el mundo. Si un país demuestra que tiene un sistema judicial de un estado de derecho, no debe dar más explicaciones, el preso pedido en extradición tendrá todas las garantías de tener un juicio justo. Si en su país hay un ciudadano de ese país al que se le pide la extradición, en ese caso sí podría mirarse ya que al ser ciudadano de tu país puedes alegar que le extraditas con la condición de que le juzguen bajo leyes que sean iguales a las de tu país. En ese caso existiría una justificación. Que no se me entienda mal, tampoco estoy de acuerdo con esto. Si un español comete un delito en Alemania se deberá acoger a las leyes alemanas. Pero podría haber una excusa.
En caso de un ciudadano de otro país y que sea su propio país el que le reclame, no hay excusa. Si el país que le reclama es un país con garantías jurídicas ¿Cuál es el problema? No puede ser que un juez alemán sea el que diga si un ciudadano español ha cometido un delito en España y más sin ni siquiera haberlo investigado, es que eso no puede ser. Si viene un estadounidense a España que le reclama la justicia estadounidense, simplemente se le extradita ¿Qué hay que mirar? Del mismo modo si viene un alemán reclamado por la justicia alemana, se le extradita sin más, sin mirar ni comprobar porque allí hay un sistema que garantiza sus derechos. Así si España reclama a un ciudadano español a Alemania, el juez alemán no debe mirar nada, aquí ya tenemos un sistema judicial con garantías. Tan garantista que nuestras cárceles son hoteles comparadas con las alemanas.
En conclusión, hay que colaborar entre los países democráticos y con garantías judiciales para evitar que los delincuentes campen a sus anchas.